mi mundo de papel

  aquí vemos a dos pitufos, dando un paseo y encontrando formas identificables en las nubes. todos hemos hecho eso alguna vez... hay un tipo de test psicológico basado en una idea similar. consiste en mostrar unas manchas de tinta sobre un papel al paciente, para que éste interprete qué forma tienen, o al menos qué ideas le inspiran. ese test fue ideado en 1921 por el psicólogo suizo hermann rorschach. se me ha ocurrido ponerlo en práctica, y para ello he descargado la tinta de un bolígrafo bic sobre una hoja de papel. lástima de boli, pero ya me compraré otro, son baratos. además la dependienta de mi papelería habitual me gusta un poquito, así que cualquier excusa para ir allí es buena. :D ésta es la mancha, después de haber doblado el papel por la mitad y haber extendido la tinta lo más posible. no sé si es una lámpara, una cabeza de ajo, una peonza, un corazón... qué os parece? el test de asociación de palabras, también sirve para detectar qué ideas rondan por la cabeza del paci

  en un cuadernillo antiguo de problemas y acertijos de matemáticas que me dio mi padre, venía este problema: “quiero hacer un collar de 80 cm de largo, alternando piezas de 7 cm y de 3 cm. ¿cuántas tendré que poner de cada clase?”. entiendo que las piezas del collar son flexibles, posiblemente sean tramos de cadena, o de varias cuentas de un mismo color. en cuanto a la longitud total, 80 cm en principio me parecía mucho. y a ver, es un collar amplio que te lo puedes meter por la cabeza sin abrirlo, pero no llega hasta el ombligo como yo pensaba. :P este problema me llamó la atención porque, tal como está planteado, tiene más de una solución. hay dos incógnitas y una sola ecuación, lo cual en teoría nos daría infinitas soluciones. sin embargo, ese conjunto se reduce mucho, ya que sólo nos valen las soluciones positivas y enteras. se entiende que las piezas del collar son indivisibles. las posibles soluciones serían: 2 piezas de 7 cm y 22 piezas de 3 cm 5 piezas de 7 cm y 15 piez

  en 1921, el inspector de policía john augustus larson inventó el polígrafo , un aparato que sirve para detectar posibles falsedades en los interrogatorios. se conecta a los dedos, los brazos, el pecho y otros puntos vitales de la persona acusada. si ésta declara algo que se aleja de la verdad, se producirán alteraciones en su presión arterial, que serán detectadas por el aparato. el polígrafo fue la culminación de otros inventos anteriores con el mismo objetivo, aunque menos eficaces. pero la idea siempre era la misma, detectar las alteraciones orgánicas cuando el interrogado se ponía nervioso al decir una mentira. cada vez se está avanzando más en el uso de tecnologías para detectar los cambios emocionales de una persona, o al menos así sucede en las novelas policiacas. ;) y no todo se reduce a las verdades o mentiras en los interrogatorios. también, por ejemplo, se observa la reacción de un sospechoso cuando se le muestran imágenes de una persona desaparecida. si manifiesta miedo

el último libro que empecé a leer en 2021 -y que será el primero que acabe en 2022- es la novela ‘la química del odio’ de carme chaparro, segunda parte de la llamada trilogía de ana arén . casualmente la historia se desarrolla durante las navidades, y además en los últimos capítulos que he leído hacen varias alusiones al día de los reyes magos, que es hoy. no podía haber elegido mejor momento para leer esta novela... en ‘la química del odio’, en otro orden de cosas, en un momento dado hacen un curioso comentario relacionado con los productos cosméticos y la economía: –(...) Y mira esta barra de labios, también de Chanel, que había en el interior. El rojo clásico de las estrellas. –Pero algo así se lo podría permitir. ¿Cuánto debe de costar? –U nos treinta euros. Sí, es que es la que yo gasto. Incluso ella, con su pensión, se la hubiera podido comprar. Ya sabes que en épocas de crisis crece el gasto en barras de labios, porque es el lujo más barato que mucha gente se puede permitir.