mi mundo de papel

hoy me han cancelado unas clases en el último momento, así que he aprovechado la tarde para hacer dos cosas: ir andando hasta la casa donde se va a mudar de manera inminente la familia de un alumno mío, para hacer el simulacro y saber cuánto se tarda. visitar el parque quinta de los molinos , que se encuentra en esa zona. quería ver también el parque del capricho , pero ése no está abierto en día laborable, y como las cosas han surgido así hoy... pues vamos a ver qué tal está este parque. la entrada mola, con lo que me gustan los arcos. ésta es la avenida principal, como si dijéramos. y ésta es una especie de calle secundaria paralela, por donde se pueden ver más arbustos con flores y esas cosas típicas de la primavera. en esto de la fotografía, voy haciendo mis *pinitos*. me quiere, no me quiere? a esto se le llama poner puertas al campo. no sé qué es este ‘coso’ -como dicen los adolescentes-, pero me ha dado ideas para problemas de geometría. el hueco es medio cilindro y un cuarto d

en 2º de bup -curso 1992-93 para mí- nos hicieron unos tests psicotécnicos, en parte con la idea de ayudarnos a elegir opción el curso siguiente. se cumple el 25 aniversario de esos tests, que los tenía guardados en un cajón. la parte de personalidad quizá es la que me parece más curiosa. los comentarios escritos en ese tipo de letra tan frío, en realidad eran copia-pegas de varios modelos de comentarios que tenían preparados según el rango de valores que obtuvieras en cada rasgo de personalidad. no es que la máquina que evaluaba los tests “te conociera”. en conjunto, creo que no he cambiado mucho. en emotividad , me venía a decir que era un agonías. en actividad , que era más o menos responsable pero un poco vaguete. en lo que llamaba resonancia -que me suena a ‘resonancia magnética’-, me decía que me comía mucho el tarro. en dominancia , parece que mi autoestima era buena -y eso que por aquel entonces sí tenía abuelas-, pero no era demasiado mandón. en reflexión , pues sí, siempre h

como os conté dos entradas más abajo, tenía una nancy que rescaté del cuarto trastero de la casa de mi abuela, pelirroja y articulada. la he arreglado un poco, y aunque soy principiante en estas cosas y aún está tan lejos de lucir tan bella como las muñecas de muchas de mis lectoras, al ver cómo estaba al principio creo que ha mejorado mucho. le di un buen baño y le lavé el pelo con champú y suavizante, tras lo cual se lo envolví en papel film transparente, siguiendo el consejo de mi amiga maria josé -quien además me regaló el conjunto de peto y zuecos que os enseñé hace un par de semanas-. mil gracias de nuevo, guapa!! :* la peiné un poco, y como estaba deseando verla con su conjunto de peto y zuecos, se lo puse cuando aún tenía el pelo húmedo. tenía cierto efecto ‘recién levantada’. después se lo he ido desenredando pacientemente, y aunque aún está mejorable, ya es otra cosa. el ojo derecho a veces se le queda más cerrado que el otro, a ver si se lo arreglo. todavía no le he puesto

en la quedada del viernes pasado con naar y álter , salió el tema de los límites matemáticos. yo traté de explicarlo con un sencillo ejemplo, haciendo servir un palillo alargado para las patatas con ali-oli como eje de coordenadas. se me ha ocurrido un caso de la vida real relacionado con los límites. la diferencia de edad entre dos personas siempre es la misma. sin embargo, a medida que esas personas van creciendo, se van igualando. por ejemplo, a naar le saco seis años. cuando yo estaba en cou y ella en 6º de egb, eso era una diferencia considerable. pero en cambio, a estas alturas de la vida esa diferencia de años no es nada. el cociente entre una variable x y esa misma x con cierta cantidad sumada, cada vez se va aproximando más a 1. eso es lo que ocurre con las edades: la diferencia se mantiene, pero no la proporción. como ejemplo pondremos el caso más sencillo, el cociente x/(x+1) . veamos cómo varía según le vamos dando valores a la x .   1/2 = 0,5   2/3 = 0,6666...   3/4 = 0